Terminar una relación no suele ser una decisión fácil, pues toda relación comienza con la convicción de que seremos capaces de permanecer junto al otro pase lo que pase, porque la idea de tener a alguien junto a nosotros “para toda la vida” nos hace sentir completos.
Sin embargo, a veces la misma vida nos dice que es momento de ROMPER ese vinculo y una vez tomada esa decisión es inevitable sentir que también algo en ti se rompe por dentro.
Tu cuerpo y tu mente te piden SANAR, pero no sabes cómo.
Tu corazón te pide volverte a AMAR, pero desconoces por dónde comenzar.